1 de enero de 2015

Lo que siembras recoges

Nunca un naranjo ha dado rosas, ni un aguacate ha dado plátanos; se recoge lo que se siembra.

El que siembra delicadezas, bondad, sonrisas, amor, eso recogerá indudablemente.

Hoy es un bello dia para preguntrame: ¿Qué he sembrado a lo largo de mi vida? ¿En mi familia?, ¿En mis hijos?.

Debo contestar con sinceridad, acaso he sembrado materialismo, rivalidad, superficialidad, etc.

¿Me escuchan mis hijos siempre hablar mal de los demás?, ¿Me escuchan mentir?, ¿Doy tiempo a mis hijos para escucharlos?, ¿He sabido guiarlos con valores humanos fuertes? ¿Me ven que amo a mi esposa(o)?.

¿Les enseño a hacer el bien, a perdonar, a disculpar, les muestro el camino del amor?

Lo que siembres hoy, recogeras mañana.

Ahora es tiempo de sembrar en todos, pero especialmente en tus hijos.

No dejes pasar ni un detalle, que te vean trabajar, dialogar, ser amoroso, servicial, sonreir, disfrutar la vida, dominar el carácter fuerte que tienes y que en veces te hace explotar.

Que te vean realizado por lo que eres y no por lo que tienes; que seas un modelo de vida para tus hijos pequeños, adolescentes y adultos.

El que siembra con entusiasmo todos los dias su amor, cosechará sin lugar a dudas amor.

No esperes recibir nunca nada y recibirás mucho, el 100 por 1.

No te canses de dar, de sembrar, de brindar el caudal de amor que llevas dentro.

Hoy todavía es tiempo de sembrar, no dejemos de hacerlo un solo momento, escuchando, perdonando y luego ya a tener derecho de ir recibiendo.

¡Qué bello es sembrar con nuestro ejemplo!

Pero qué difícil es la congruencia entre lo que decimos y lo que vivimos.

Con la ayuda de Dios y siendo personas positivas hagamos un ambiente donde se palpe la calidad humana y cristiana. ¡Animo y adelante!

Lo que siembres hoy,recogerás mañana.